miércoles, 15 de agosto de 2012

Cuando estaba en el instituto y discutía con mi padre, cogía la moto y venía aquí con un libro e incluso una cerveza... y me tendía al sol sobre la tumba de Keats.
¿Ves lo que quiso escribir? "Aquí yace un hombre cuyo nombre se escribió en el agua" Imagínate...-le explico Guido, risueño- Sus enemigos habían acabado por amargarlo. No obstante, mira como le respondió alguien- "Keats! Si tu querido nombre se escribió en el agua, cada gota cayó del rostro de los que te lloran..." Precioso ¿verdad? Alguien quiso que se sintiera amado. Quizá un desconocido...a saber.. Lo más extraño es que a veces no nos damos cuenta de hasta qué punto nos quieren las personas que nos rodean, y quizá el autor de estas palabras jamás le dijo nada, tal vez se conocieron por casualidad o de pasada, o puede que ni siquiera se saludaran nunca... Perdona pero quiero casarme contigo. Federico Moccia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario